En una de nuestras tantas visitas a la ciudad de Londres, pasamos por el “Museo del Ejército” (National Army Museum) y dentro de las piezas que se exhiben en la muestra correspondiente a la “Batalla de Waterloo” nos llamó la atención una en particular.
El esqueleto completo de un caballo, con una placa que lo identifica como “Marengo” y aquí contaremos un poco su historia.
“Marengo” fue uno de los 130 ejemplares que componían la cuadra del Emperador de Francia.
“Un Pura Sangre Árabe de alzada baja, aproximadamente 1,45m completamente blanco y una constitución bastante fuerte” según relatan los cronistas del emperador.
Fue importado desde Egipto en el 1800, año en el cual Napoleón derrota a las tropas de la segunda coalición en la localidad de Alessandria en el Piemonte Italiano anexando la península itálica al imperio. Esta batalla fue conocida como “La Batalla de Marengo”. Como recordatorio de una de sus grandes victorias, Napoleón decidió nombrar a su recientemente importado corcel “Marengo”.
Marengo fue un fiel compañero del hombre más poderoso de Europa, a quien acompañó por primera vez en la batalla el 2 de diciembre de 1805, en la Batalla de Austerlitz, también conocida como La batalla de los Tres Emperadores, donde Napoleón se impone a las fuerzas de la Tercera Coalición al mando del Zar Alejandro I y el Emperador Austriaco Francisco I.
La victoria fue tan aplastante y decisiva que obligó al Imperio Austríaco a firmar la paz con Francia y provocó la caída no solo de la Tercera Coalición, sino de todo el Sacro Imperio Romano Germánico.
El 14 de Octubre de 1806 marengo cabalga nuevamente a la batalla, en la Batalla de Jena, donde se enfrentan al segundo ejército prusiano comandado por Federico Guillermo III de Prusia , otra victoria decisiva de Napoleón y el inicio de la ocupación francesa en Prusia.
El 5 y 6 de julio de 1809 Marengo y Napoleón cabalgan juntos de nuevo, esta vez en Wagram donde nuevamente los ejércitos del Mariscal y Emperador se imponen decisivamente, esta vez ante la Quinta Coalición poniendo fin a las aspiraciones del Archiduque Carlos de Austria y sus aliados del Reino Unido de Gran Bretaña
Marengo y Napoleón cabalgaron juntos muchas veces, la más memorable quizás fue cuando cubrieron en cinco horas los ciento treinta kilómetros que separan Valladolid de burgos, y ambos sobrevivieron a la cruenta y desastrosa campaña rusa de 1812.
Finalmente, ambos marcharon a la guerra por última vez. Había regresado junto a su Emperador a País y marchó al galope firme y seguro aquel 18 de junio de 1815 en Waterloo, una población de la actual Bélgica. Juntos lideraron la última carga del ejército francés, Marengo quien había ganado su fama por su indomable espíritu y su coraje a toda prueba galopa junto a Bonaparte, las explosiones y las balas repican a su lado hasta que una bomba de metralla lo alcanza y lo hiere. Napoleón es capturado y abdica para ser preso en Santa Elena donde fallecería en 1821, Marengo yace en el campo de Waterloo, esperando su suerte, y quiere el destino que el Teniente Británico William Henry Francis Petre, 11º Barón de Petre lo encuentre y reconozca los blasones imperiales que portaba el corcel.
Marengo quien había nacido en 1793 es capturado por el enemigo y vendido por éste al Teniente coronel William Angerstein miembro de los Guardias Granaderos quien lo conservó hasta que finalmente el sufrido y valiente corcel falleció en 1831 a los 38 años de edad.
Su esqueleto fue preservado en el museo del ejército nacional que visitáremos, mientras que sus cascos fueron convertidos en cajas de tabaco trabajadas en plata que Angerstein conservo como recuerdo.
la historia de un silencioso participante de la historia que con su firme galope y su coraje y resistencia ayudó a forjar los destinos del mundo entero.
Hasta la próxima entrega donde hablaremos de nuevos personajes y sucesos, aquellos que caminan por los recovecos y los senderos de la historia.
Material de consulta:
McLynn, Frank (1997). Napoleon: A Biography